UNIDAD PERO CON EL MOVIMIENTO SOLIDARIO CON AYOTZINAPA QUE CLAMA ¡FUERA PEÑA NIETO!
NO UNIDAD ELECTORAL CON MORENA
Después del importante Segundo Encuentro de Todas las Resistencias realizado el pasado sábado 10 de enero, unos grupos que firman como una supuesta Coordinadora de la IV Internacional en México circulan ahora una declaración titulada "Forjemos la unidad, desterremos el sectarismo" cuyas posiciones no dieron a conocer en el Encuentro pero que al referirse a los temas de debate del mismo generan confusión sobre la unidad que se está forjando al pretender vincularla a la campaña electoral de MORENA este 2015.
Además de promover vergonzantemente el apoyo a MORENA para las elecciones de este año, ante un movimiento que al reclamar ¡Fuera Peña! y FUE EL ESTADO, está luchando por la salida del régimen político, dominado por la oligarquía neoliberal, y contra el sistema de partidos actual, recurren a firmar de manera que se piense que la IV Internacional puede avalar la idea un partido pluriclasista como Morena, lo que es falso.
Ciertamente estamos a favor de la más amplia unidad del actual movimiento solidario con Ayotzinapa y su convergencia con todos los movimientos que luchan, se oponen y resisten contra las reformas estructurales neoliberales impuestas por Peña Nieto y los partidos del Pacto por México. De hecho, el tema central del Segundo Encuentro de Todas las Resistencias celebrado en el SME fue el tema de la unidad. Pero la unidad que ahí se planteó que hay que lograr es en el terreno de la lucha contra el régimen de Peña Nieto, en la medida que el movimiento está planteando al mismo tiempo la presentación con vida de los 43 desaparecidos y FUE EL ESTADO, que se traduce tanto en la consigna de ¡Fuera Peña!, como en el señalamiento hecho por los padres y estudiantes de Ayotzinapa de que fue el ejército el responsable directo y los desparecidos llevados vivos a cuarteles militares no a fosas o basureros.Es decir, se trata de la unidad de todos los movimientos y sus diferentes referentes para luchar en esa perspectiva política, pero no se planteó como unidad electoral con Morena. Una cosa es que se haya planteado no polarizar con aquellas personas o grupos que simpatizan o son de Morena o que tienen ilusiones en las elecciones para tratar de sacar un acuerdo unitario para la lucha y otra cosa es que, para supuestamente no ser sectarios, implicar que es posible la unidad electoral o la participación electoral con alguno de los partidos institucionales. Si hay compañeros con ilusiones electorales o están afiliados a Morena que están de acuerdo en luchar junto con este movimiento por sacar a Peña, son bienvenidos en la unidad del movimiento pero no es una unidad con Morena que está en otra lógica y otro carril.
En la OPT, el tema es meridianamente claro porque primero en su Consejo Nacional y recientemente, en el mes de diciembre, en su primer Congreso Nacional el acuerdo es que la OPT no participa en las elecciones del 2015 y no hace acuerdos con ninguno de los partidos institucionales o reconocidos por el INE ni sus integrantes aceptan en lo individual propuestas de candidaturas de alguno de esos partidos.
En el Segundo Encuentro, como en la OPT, la reflexión apunta más bien en definir la estrategia política por el Fuera Peña y la lucha por sacar del poder a la oligarquía neoliberal, a la luz del avance y la radicalización del movimiento donde la perspectiva del proceso electoral de este año se ubica como un obstáculo o una mediatización de la crítica y descrédito que entre el pueblo tiene todo el sistema político electoral en este momento. Por eso desde Guerrero se plantea más bien el boycot al proceso electoral que concluye en junio. No una táctica de abstención, sino de boicotear las elecciones, como lo muestran boicoteando el funcionamiento de las instancias electorales desde hoy, cinco meses antes de las votaciones. ¿Es posible extender eso a nivel nacional o no es posible? Y si no es posible, ¿qué puede hacerse como equivalente para continuar la lucha por la caída del régimen político? Esto es parte de lo que discuten los encuentros y que las siguientes semanas se abordarán en los diversos espacios y buscando lograr la unidad, pero una unidad en torno a la perspectiva política de la consigna de Fuera Peña que expresa la desconfianza no solamente en el propio Peña, sino en el conjunto de partidos y su sistema.
Por lo anterior es que nuestra discusión sobre la unidad en la lucha no tiene que ver nada con la participación electoral y una supuesta unidad electoral o con Morena que es lo que los firmantes sugieren con su llamada a "desterrar el sectarismo".
La diferencia con Morena en este terreno es muy clara desde el principio del movimiento surgido el 26 de septiembre.Cuando la movilización de masas, como nunca antes en el país, se desbordaba en muchas ciudades exigiendo y clamando "Fuera Peña Nieto!", ¿qué planteaba López Obrador?. AMLO planteaba que Peña Nieto renuncie antes del 1 de diciembre para convocar a elecciones anticipadas.
Cuando el movimiento llegaba al nivel más alto de crítica al sistema, al desconfiar de todos los partidos y del sistema político electoral, AMLO busca regresar al movimiento al terreno institucional. Pedía que Peña renunciara para convocar a elecciones anticipadas ¿organizadas por el INE? para elegir presidente de entre los candidatos de los partidos registrados: PRI, PAN, PRD ¿o Morena? Obviamente era un retroceso para el nivel del movimiento. La salida institucional, de instituciones corruptas, en crisis de legitimidad y decadentes, de elecciones anticipadas es como la salida institucional al forzar que Angel Aguirre pidiera licencia (y otorgarle impunidad) e imponer a un nuevo gobernador en Guerrero con pasado de izquierda y colaboradores del PRD y con pasado de izquierda. ¿Y cuál fue el resultado? El movimiento no reconoce como interlocutor al nuevo gobernador ni resuelve el conflicto detonado por Ayotzinapa. Por el contrario. Es ahí donde el movimiento dice que no es suficiente con el encarcelamiento de un presidente municipal corrupto y el cese del gobernador y dice FUE EL Estado, ¡Fuera Peña Nieto!
Como lo de las elecciones anticipadas no resultó, ahora el régimen busca otra manera de mediatizar al movimiento y ayudarle a que "supere" el trauma de Ayotzinapa, como dice Peña. ¿Cuál es ése instrumento para desactivar el actual movimiento? El proceso electoral del 2015.
Los firmantes del documento que llaman a desterrar el sectarismo y "forjar la unidad" en realidad están pensando en la unidad electoral con Morena. Lo dicen claramente en su texto cuando hablan con entusiasmo de la "expectativa, según las ultimas encuestas, de que Morena capitalice el voto en contra de los partidos del sistema: PRI-PAN-PRD-Verde".
¿Y que pasaría si Morena capitaliza el voto contra el PRI o el PRD? De qué sirve? En qué ayuda al movimiento que reclama la salida de Peña y la presentación con vida de los desaparecidos? En nada, francamente. No se entiende que no se está frente a cualquier proceso electoral, sino en medio de una crisis de legitimidad de las institiuciones políticos electorales y de justicia como nunca antes en la historia reciente del país y que en ese contexto llamar a participar en estas elecciones es la vía del sistema para mediatizar la crisis, salir de la crisis, logrando que el descontento que se expresa en movilizaciones gigantescas en la calle, se posponga, se hagan mitines de proselitismo electoral y el descontento se canalice metiendo una papeleta cruzando el voto por Morena! Y luego, dejar que el INE, el mismo que le ha hecho los fraudes a AMLO en las presidenciales, califique estas elecciones y mida cuánto es el "descontento".
Es la misma lógica institucionalista de López Obrador de cuando llamaba a elecciones anticipadas. Nada más que ahora para participar en una campaña de 5 meses de actos de proselitismo electoral para finalmente expresar tu enojo con un voto y no con movilizaciones, bloqueos, boicots etc
La propuesta de los de Morena, como la de los que nos llaman a no ser sectarios y buscar la unidad electoral con Morena, ayuda al sistema a recuperar la estabilidad y el crédito que ha perdido ante millones de personas. Al sistema en este momento de crisis, no le preocupa que Morena capitalice el voto contra el PRI, PAN y PRD. Lo que necesita es que el movimiento regrese a los cauces institucionales, de unas instituciones corruptas y decadentes, que son repudiadas por millones que ya no tienen confianza en ellas.
La campaña electoral del 2015 es el instrumento para re estabilizar al sistema político mexicano, que es lo que urgentemente requiere y necesita el PRI. Si logran meter al movimiento en la dinámica de este proceso electoral se contribuirá a esa re estabilización, y se habrá perdido la oportunidad histórica de cambio de régimen. Los que piden moderación no se dan cuenta de que el riesgo de represión es mayor si el régimen logra re estabilizar la situación, recuperar algo de credibilidad y dividir al movimiento para marginar a los "intransigentes".
Algunos voceros de Morena dicen que hay que ser políticos, que esta línea, como la abstencionista, no es política. Se equivocan. Nuestro planteamiento tiene que ver con que el movimiento ha llegado al momento más alto de la lucha política al cuestionar al régimen y exigir la salida de Peña Nieto. Es al revés. La nuestra es la perspectiva política, la de ellos es solamente electoral (en elecciones intermedias, además) y a favor de ayudar a re estabilizar la situación política y ayudar a que las instituciones recuperen parte de la credibilidad perdida. Reyes Heroles, teórico del sistema, lo decía: "el que resiste, apoya". En el momento de la mayor crisis política y de legitimidad de las instituciones, llamar a expresar simplemente el descontento en las urnas es eso: apoyar al sistema en su agonía.
Además, está por verse si en la crisis de legitimidad de las instituciones, los nuevos partidos pueden mostrarse realmente como alternativos al PRI, PAN y PRD. El llamado partido Humanista, a unos meses de su registro, ya está en disputa interna por los dineros y la presidencia del partido expulsándose los grupos en pugna mutuamente. Y Morena, como reedición del PRD, ya está también en pugnas y renuncias por la definición de las candidaturas para junio, con la conocida queja de falta de transparencia, verticalismo y caudillismo para resolverlas. ¿Y así creen que van a capitalizar el voto contra el PRI, PAN o PRD?
Obviamente, cada quien es libre de sostener la posición y afiliación que quiera. Y es mejor hacerlo y decirlo abiertamente, sin ocultarse, anónimamente o cubriéndose con otros nombres o referencias para engañar o dotarse de una autoridad o legitimidad inexistente. Esto es lo que hacen los que firman el texto a nombre de una supuesta, pero inexistente, Coordinadora de la IV Internacional en México, integrada por supuestos grupos de simpatizantes de la IV internacional sin nombre en el DF o en Colima.
El PRT, que es la sección mexicana de la IV Internacional, no sabíamos de ninguna "Coordinadora de la IV en México", ni existe tal instancia en el marco de la Internacional ni se ha reconocido nunca antes.
Firmar como una supuesta coordinadora de la IV Internacional en México o como supuestos simpatizantes de la Internacional en Colima cuando en realidad son miembros de MORENA crea confusión y pretende darle cobertura de izquierda y revolucionaria a una posición equivocada para decir lo menos, pero que en realidad viene en auxilio al sistema en crisis por medio de la propuesta de Morena. Es mejor que digan abiertamente que son afiliados de MORENA o que están convencidos de apoyar o hacer alianza con MORENA y que no se presenten de manera que se piense que expresan una posición de la Internacional.
La IV Internacional está a favor de impulsar la creación de partidos amplios pero anicapitalistas, no partidos pluriclasistas como MORENA. Es por eso que el PRT, la sección mexicana de la IV Internacional, en consecuencia con esa orientación acordada en el pasado Congreso Mundial, apoya y participa en la OPT (Organización Política del pueblo y los Trabajadores) como el proyecto de un amplio partido de la clase trabajadora y el pueblo en México y no puede apoyar un partido pluriclasista como MORENA. incluso, independientemente de táctica electoral, no podemos participar o afiliarnos a un partido como MORENA.
Damos la bienvenida a compañeros que se declaran simpatizantes de la IV Internacional en México.Nos parece muy bien, pero para evitar confusiones y si realmente simpatizan con la Internacional deben saber que es incongruente con la afiliación y la militancia en partido pluriclasista como MORENA. A estos declarados simpatizantes de la Internacional entonces, los invitamos a actuar en consecuencia y romper con MORENA para apoyar en todo caso una perspectiva propia de la clase trabajadora como la OPT
Y los invitamos a discutir francamente la orientación política que el movimiento solidario con Ayotzinapa se ha dado de "Fuera Peña Nieto" que es diferente a la de la unidad electoral con MORENA.
Discutirlo franca y abiertamente y sin ocultarse queriendo dar autoridad a su posición como si fuera de la IV Internacional o sacando de contexto citas como la del camarada Guillermo Almeyra que usan como epígrafe que no propone unidad electoral con Morena, sino en la lucha por sacar a Peña Nieto o recurrir a reivindicar el procedimiento democrático de la Nueva Central de Trabajadores para pretender justificar una política ambigua como la de los que dicen que el proyecto de OPT es estratégico pero el de MORENA es táctico por lo que, en aras de lo inmediato, de lo táctico, por lo pronto este año de 2015 hacer alianza con MORENA. Adicionalmente, si quieren hacer uso de ejemplos internacionales como los de América del Sur, no deben olvidar que en casos como los de gobiernos progresistas que llegan a la presidencia por medio de elecciones, estuvieron frecuentemente precedidos por potentos movimientos políticos sociales, incluso por presidentes derribados en medio de esas luchas.
Bienvenida la discusión, pero abierta. Bienvenidos los simpatizantes de la IV Internacional pero para actuar en consecuencia con la política de la Internacional..
México, D. F. a 18 de enero de 2015.
El Comité Político del
Partido Revolucionario de los Trabajadores
Sección Mexicana de la IV Internacional
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¡Forjemos la unidad, desterremos el sectarismo!
“Es hora de unir el repudio al Estado y a sus instituciones de los neozapatistas
con el repudio a este Estado y este gobierno de los millones que depositan
sus esperanzas en Morena y con el de los estudiantes y demócratas de todo tipo,
hartos de las atrocidades cotidianas. Como piden los familiares de los normalistas
de Ayotzinapa es hora de que el Estado pague y de echar al gobierno a Peña Nieto.
Es hora de unirse. O nos salvamos juntos o nos hundimos por separado.”
Guillermo Almeyra, “México: lo viejo y los nuevo”
La Jornada 28 de diciembre
La justa indignación nacional por el asesinato y desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa -que condensa décadas de rabia por la creciente miseria, violencia, despojo, corrupción e impunidad, que provoca la avaricia de los de arriba-, está generando diversas demandas como la renuncia de Enrique Peña Nieto, la convocatoria a un congreso constituyente, el boicot a las elecciones parlamentarias de este año o la expectativa, según las últimas encuestas, de que Morena capitalice el voto de protesta en contra de los partidos del sistema PRI-PAN-PRD-Verde.
Tendría fatales consecuencias, para quienes nos ubicamos de este lado de la barricada, el que nuestro movimiento se dividiese por una diferencia de ópticas electorales. El tema electoral, cualquiera que sea la postura que se adopte, no debe ser obstáculo para alcanzar la unidad de acción en diversos asuntos vitales. Después de todo participar en las elecciones no es una cuestión de principio, lo mismo que no participar. Es hora de atrevernos a mirar por encima de las diferencias tácticas para ponernos de acuerdo en las cuestiones estratégicas. ¿Qué queremos decir con esto?
El problema es el sistema capitalista no solo el régimen
La ofensiva del capital sobre el trabajo, en su inmensa variedad de formas y contenidos, va más allá de la coyuntura electoral. ¿Acaso la ofensiva sobre nuestras condiciones de trabajo, salarios y criminalización de las luchas sociales se va a detener hasta después de las elecciones? Por el contrario, la lucha por la presentación con vida de los 43 estudiantes normalistas, para romper los topes salariales en las revisiones contractuales de inicios de año, por la liberación de los presos políticos, por la defensa de los derechos laborales de los trabajadores de la salud, contra la reforma educativa, entre muchas otras, requieren respuestas INMEDIATAS, que no pueden esperar hasta que los diversos movimientos nos pongamos de acuerdo en la cuestión electoral.
La primera tarea de los movimientos sociales en los próximos días es la de construir una articulación de todos los movimientos y fuerzas, dispuestos a levantar un programa de lucha que recoja sus demandas más inmediatas: fin inmediato de la estrategia de guerra; regreso del ejército a los cuarteles; presentación con vida de los desparecidos; liberación de todos los presos políticos; por el derecho a la autodefensa y el fin de los grupos criminales y paramilitares; aumento salarial de emergencia; derogación de las reformas neoliberales en materia energética, educativa y laboral; ni una reforma neoliberal más; renuncia de EPN; por un Nuevo Constituyente.
Forjar esta unidad requiere vencer cualquier tipo de sectarismo e iniciar procesos de organización en una sociedad aún desorganizada o dominada por el corporativismo. La más amplia UNIDAD de los de abajo es la condición primera para alcanzar cualquiera de los objetivos mencionados.
Si no somos capaces de construir un espacio unitario en donde converjan los principales movimientos sociales –Asamblea Nacional Popular, Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación, Nueva Central de Trabajadores, Unión Nacional de Trabajadores, Asamblea Nacional de Afectados Ambientales, Congreso Nacional Indígena, organizaciones campesinas, Asamblea Interuniversitaria, movimiento urbano popular, etc.-, estaremos condenados al fracaso.
¿Es posible que en esta unidad converjan organizaciones que participan en procesos electorales y las que se oponen? Por supuesto que sí. La Nueva Central de Trabajadores es un buen ejemplo de ello. La unidad en torno a un programa de lucha clasista y un funcionamiento democrático son más imperiosos que las diferencias en torno al tema electoral. En la NCT se respeta el derecho de sus organizaciones a disentir y a su autonomía para tomar sus propios acuerdos. Sí esta unidad es factible en el seno de una misma organización ¿por qué no habría de serlo en el marco de una convergencia más amplia?
Podemos estar o no de acuerdo en la participación en el proceso electoral de 2015, pero tampoco podemos descalificar a todos los procesos electorales, a todos los partidos y mucho menos a todas las candidaturas. Mucho ha ganado nuestra Patria Grande con candidaturas como las de Hugo Chávez o Evo Morales. Debemos, eso sí, aprender a respetar nuestras diferencias sobre ese y muchos otras temas y nunca anteponerlas a la necesaria unidad de acción en contra de nuestro enemigo común.
Las organizaciones signantes de esta propuesta –simpatizantes de la IV Internacional-, también utilizamos tácticas diferentes en el tema electoral, pero coincidimos en lo fundamental: construir la unidad de los de abajo no solo para la consecución de nuestros objetivos inmediatos, sino para la construcción de un gobierno de la clase trabajadora.
¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!
¡Basta de guerra, que llegue la paz!
¡Fuera peña Nieto!
¡Viva la unidad obrera, campesina, estudiantil y popular!
México D. F. a 14 de enero de 2015
FRATERNALMENTE
Colectivo de la IV Internacional en el estado de Colima.
Militantes de la IV en la Ciudad de México.
Liga Socialista Revolucionaria
Movimiento de Unidad Socialista
